Está decidido
En una inexorable resolución administrativa.
Sí…
Quieren tu cirrótico hígado latente,
Todo tu sistema digestivo enfermo y cansado
blando y mal alimentado de obligada escoria.
Entrarán a tu lecho hipotecado donde tú dormitas,
Lamerán la sangre que aún derramas:
Intereses de demora, ¡maldito ciudadano corriente!.
Te encerrarán y escribirás cartas desde tu celda triste:
“Querida madre…
Creo que he sido un mal hijo para usted…”
Pusilánime e idiotizado en una diarrea sangrienta
verterán líquidos fecales en la herida abierta.
Castración…(arrancarte tu vergonzoso miembro indecente).
Ellos lo quieren…
Quebrantar tus huesos cándidos,
Manipular tus entrañas con arcano sadismo,
Y tú, aún cuerpo vivo, resistirás en vano.
Tu doloroso alarido será archivado en un dato informático más.
Y tu carne ha de pudrirse bajo una espesa capa de terruño enmohecido.
Estos hombres uniformados quieren tus vísceras…
Cuidarán, no obstante, detener la hemorragia…procurarte la mínima vida.